Más allá de las actuales iniciativas en este sentido, evaluaremos y actualizaremos el sistema de alumbrado público existente, garantizando una mayor eficiencia energética y una reducción en los costos de mantenimiento. Para ello, se llevará a cabo un estudio exhaustivo de las zonas con mayor necesidad de iluminación y se procederá a la sustitución de las luminarias y los sistemas de control obsoletos por tecnología de última generación (LED).

En segundo lugar, también nos comprometemos a mejorar la iluminación de los espacios públicos y de las zonas más transitadas. Trabajaremos en la implantación de sistemas de control y regulación que permitan la adaptación del alumbrado a las necesidades de cada momento, evitando la iluminación innecesaria y reduciendo el impacto lumínico en la noche, para así lograr una reducción del consumo eléctrico.

Pondremos en marcha un servicio de mantenimiento preventivo y correctivo para conseguir que todas las luminarias funcionen correctamente en todo momento y se garantice la seguridad de los ciudadanos. Con estas medidas, lograremos un municipio más seguro, eficiente y sostenible.